El Ayuntamiento de Valencia ha movilizado un total de 52 millones de euros, desde noviembre de 2024 hasta hoy, para afrontar las actuaciones de reconstrucción y emergencia llevadas a cabo tras los daños que azotaron la ciudad y la comarca en octubre del pasado año 2024. Así lo explicó este martes el portavoz del ayuntamiento, Juan Carlos Caballero, quien aseguró que “Valencia ha cumplido el 84% de los acuerdos de la comisión pericial de “la dana”.

“Hoy recordamos que hace un año estuvimos aquí, en este pleno municipal, cuando se activó la alerta roja en nuestro municipio y se produjo la peor tragedia nacional que hemos conocido, el peor desastre natural que azotó nuestra ciudad, el área metropolitana de Valencia, haciendo y provocando todo lo que pasó a su paso, con daños materiales y sobre todo personales a muchas personas, 17 vecinos de la ciudad y más de 200 en toda la provincia”, afirmó Juan Carlos Caballero. «Se trata de un daño irreparable que hoy queremos recordar y rendir homenaje a sus víctimas. Y, además -aseguró- queremos seguir apostando por hacer de Valencia una ciudad mucho más segura y resiliente». “Queremos seguir comprometiéndonos a tomar en cuenta todo lo aprendido este año, a continuar el proceso de recuperación de los barrios afectados por la dana y a apoyar a los vecinos en la recuperación, en la vuelta a la normalidad, en la que podrán recuperar al máximo sus casas, sus hogares, sus hogares y sus vidas”.

La actuación municipal tras la inundación se concretó en diferentes ámbitos de gestión. En el ámbito de la limpieza, la intervención en las vías urbanas desde el inicio de la emergencia ha permitido evacuar un volumen de 27.570 toneladas de residuos de las calles, alcantarillas y garajes afectados e inundados, así como un total de 3.500 vehículos. A esto se suman las 2.500 toneladas de residuos extraídas de la Albufera y otras 42.000 toneladas de las playas de la ciudad.

Paralelamente, se limpiaron caminos rurales y parques infantiles, así como colegios y centros educativos de los barrios afectados: CEIP Forn d’Alcedo, CEIP Padre Manjón, en La Torre, y el colegio de educación especial Rosa Llácer, en Castellar. Y tras ser reparada se puso en servicio la biblioteca de Castellar que, como el resto de instalaciones, sufrió los efectos del agua y el barro.

La actuación de reconstrucción también incluyó la reparación de las instalaciones deportivas afectadas. Es el caso del campo de fútbol de La Torre y de la piscina de Castellar, que se pudo utilizar este verano a pesar de los graves daños causados ​​por la riada, así como otras instalaciones de los tres barrios que sufrieron las consecuencias de las inundaciones.

El conjunto de instalaciones que se han solicitado durante estos meses para su reparación y puesta en servicio son los centros municipales de mayores de La Torre y Forn d’Alcedo, así como las instalaciones de la Universidad Popular de los tres distritos. Finalmente, se creó un nuevo centro permanente de servicios sociales en La Torre, al ver la necesidad de una atención especial y más personalizada en la ciudad.

El escudo social

El portavoz municipal también mencionó las iniciativas de “escudo social” adoptadas por el consistorio. Se trata de una ayuda de emergencia por importe de 1,5 millones de euros, aprobada para cubrir necesidades básicas de mantenimiento, adquisición de electrodomésticos o mobiliario de primera necesidad, entre otras. Caballero destacó que “se han atendido todas las solicitudes de servicios municipales a domicilio como Ayuda a Domicilio, Teleasistencia y Menjar a Casa”.

Precisamente, desde el ayuntamiento se ha desplegado un programa de atención a la población afectada por dana, también en materia sociosocial y de salud mental. Además, el Ayuntamiento ha puesto a disposición más de 40 viviendas para personas que han perdido su vivienda. Actualmente, 69 personas están realojadas en viviendas municipales.

En este contexto, el portavoz municipal también destacó las iniciativas en el marco fiscal y fiscal, y recordó que tras la tragedia se acordó eximir a los habitantes de los tres barrios del pago de la tasa de agua potable y saneamiento desde el día de los daños hasta el 31 de marzo, «lo que supone una cantidad de más de 800.000 euros». También se aprobó la devolución de los recibos del IBI (Impuesto sobre Bienes Inmuebles), y también se acordó no cobrar tasas por la instalación de vados, mesas y sillas, y quioscos en la vía pública, así como en mercados extraordinarios u ordinarios desde el momento de la tragedia y durante todo el año 2025 «todo con el objetivo de favorecer la recuperación y fomentar el comercio local», enfatizó Caballero.

Al mismo tiempo, el ICIO recibió una subvención del 95% para las obras de reconstrucción de edificios de los barrios afectados, que, hasta el momento, han permitido ahorrar casi un millón de euros. Asimismo, dejaron de cobrarse los cánones por la prestación de servicios relacionados con actuaciones urbanísticas en obras relacionadas con los daños causados ​​por la riada, así como los cánones por el uso del dominio público con bienes, materiales de construcción y zanjas en obras realizadas tras la riada. «Todo esto permitió a los residentes ahorrar más de 2,7 millones de euros», subrayó el portavoz del municipio.

En el ámbito de la actividad comercial, las ayudas a los comercios afectados, no sólo en los tres distritos, sino también en todos los distritos del sur que sufrieron las consecuencias indirectas de la dana (como, por ejemplo, la hostelería de El Palmar) ascendieron en total a 4 millones de euros.

A ellas se suman las ayudas directas destinadas a asociaciones, autónomos y entidades del sector cultural ubicadas en La Torre, Forn d’Alcedo y Castellar, así como a comisiones falleras y artistas falleros.

Reparación de infraestructura

Además de todas las iniciativas inmediatas de emergencia y apoyo a la reanudación de vidas y actividades, el Ayuntamiento también ha impulsado importantes actuaciones para reconstruir las infraestructuras dañadas, y ha implementado acciones de alerta y formación entre la ciudadanía, estando atentos a posibles emergencias futuras para poder afrontarlas con preparación en todos los ámbitos.

Así, el concejal Juan Carlos Caballero mencionó en primer lugar las obras de reconstrucción y adecuación de la red de alcantarillado en los barrios del sur, la reparación y adecuación de la red colectora, así como la sustitución de desagües e imbornales en La Torre, y la renovación del alumbrado en los tres barrios afectados.

Asimismo, enfatizó Caballero, ya se está trabajando en la modificación del Plan General Urbano para que las nuevas edificaciones de La Torre puedan incluir garajes en altura, lo que constituye una medida preventiva eficaz ante posibles inundaciones masivas como la del 29 de octubre.

También se ha instalado en la sede del Ayuntamiento de La Torre una sirena acústica con una potencia capaz de alcanzar entre 2 y 3 kilómetros en todas direcciones, y que se activa mediante mando a distancia. Ya se ha realizado un ejercicio de alerta entre la población residente y se ha establecido un plan con puntos y rutas de evacuación y reunión de la población vulnerable en caso de emergencia.

Valencia + Caja Fuerte

Una de las principales novedades en el ámbito de la formación ciudadana es el Plan València + Segura, puesto en marcha por el Ayuntamiento. De hecho, ya se han organizado más de un centenar de jornadas formativas en los tres distritos para promover una cultura de prevención y autoprotección. La formación se llevó a cabo con la colaboración de la Universidad de Valencia.

Además, está en marcha un estudio específico de riesgos de inundaciones para València, «que nos permitirá analizar la peligrosidad y el riesgo de crecidas de los ríos de nuestro término municipal, con especial atención a los riesgos derivados de los barrancos de Poio y Carraixet, así como del río Turia», destacó Caballero.

El concejal concluyó recordando que el Ayuntamiento ya ha instalado un total de seis cámaras de vigilancia y un radar para monitorizar el estado del caudal en el nuevo cauce del río Túria, con el fin de evitar posibles inundaciones. Finalmente, se acometió la limpieza del río, de la que se retiraron 144 toneladas de residuos, y también se iniciaron las labores de limpieza y evacuación de residuos del barranco de Palmaret a su paso por el término municipal, especialmente a la altura de Carpesa y Massarrojos.

Para finalizar su intervención, Juan Carlos Caballero indicó que «el Ayuntamiento de Valencia y la alcaldesa, María José Catalá, han estado en todo momento al lado de los vecinos afectados por la dana, interactuando con ellos, escuchándoles, mostrándoles empatía, recorriendo las calles, hablando con ellos y tomando medidas para poder volver a la normalidad en todos los barrios».